Jornada imparable

Hoy teníamos muchas ganas de empezar hacer las visitas a algunos barrios de Tokio. Al estar nuestro apartamento cerca del barrio de Ueno, nos hemos acercado a pie hasta allí. El Parque Ueno es muy concurrido por sus cerezos en flor. En este parque también se pueden encontrar un zoológico, templos y museos. En un próximo articulo (post) os daré más información sobre ellos. Nuestro objetivo hoy es pasear y ver los cerezos, sobretodo, por el soleado día que teníamos.

Entrada al Parque de Ueno

Esta escultura de una ballena jorobada impacta a la entrada al parque por su tamaño y por el conjunto armonioso con el cerezo en flor.

 Algunas jóvenes paseaban luciendo alegremente sus kimonos.

A continuación visitamos este hermoso templo rodeado de un precioso jardín. Ha sido un acierto venir a Japón en la época del SAKURA.

 A pie, también, nos dirigimos hacia el barrio de Asakusa. En estas fotos se puede observar los contrastes que ofrece Japón. Avanzada tecnología y conservación de su cultura y tradiciones, como los portadores de rickshaws

o el transporte en bicicleta que hacen la mayoría de las madres para llevar a sus hij@s al colegio, aunque a algún padre también vimos.

Asakusa es un barrio con muchas tiendas y allí podemos encontrar el templo de Sensoji, el templo más antiguo de Tokio. Pero antes de visitarlo fuimos a comer a un restaurante típico japones, sentados en el suelo, donde degustamos entre otras cosas unas deliciosas tempuras.

Primera sentada en Japón

Tempura de marisco.

Tempura de verduritas

La entrada mas importante al templo se hace por la puerta de los truenos, puerta Kaminarimon y de allí a la calle Nakamise donde se encuentran tiendas de recuerdos, dulces típicos y toda clase de objetos japoneses.

Antes de llegar al templo se puede ver a la gente con los papelitos de la fortuna llamados "omikuji" o lavándose las manos y la boca en el "Temizuya".

 El templo era muy diferente. La decoración del techo y las columnas era muy bonita. Está prohibido hacer fotos al interior del "altar". Este es un sitio de peregrinación.

 Cerca de allí nos encontramos con el guía que nos acompañaría en Tokio. Estuvimos tomando un helado de "te matcha!, que a mi me pareció un poco fuerte.

Nos llevó por las calles explicándonos peculiaridades de su experiencia en Japón.

Fuimos a visitar el Centro de Información Turística y Cultural de Asakusa que se encuentra frente a la puerta de Kaminarimon. Es muy interesante y se puede navegar gratuitamente por internet. Tiene varias plantas y la terraza donde la vista de la famosa torre "Skytree" y el barrio de Asakusa es impresionante.

Nuestro guía nos dio muchos consejos y nos llevó a cenar a un "Izakaya". Es un restaurante japonés donde se piden raciones que se comparten entre los comensales.

Hay muchas terracitas y comensales por las calles.

Los hombres se dirigen a algunos bares cuando terminan de trabajar, (se puede ver en una de las fotos), la única mujer es la camarera.

En algunos restaurantes se exponen los platos en una vitrina al exterior. Los platos y la comida están hechos de plástico pero reflejan muy bien los ingredientes.

Terminamos exhaustos pero felices.